La propia Duquesa contó en sus memorias que la relación se había torcido por la “intromisión de terceras personas por la parte de Fran”. “Yo ahí ni entro ni salgo, pero lo cierto es que Fran le pidió perdón muchas veces y ella no deseó disculparle, de tan herida que se sentía”, explicó Cayetana Fitz-James Stuart. Para ese momento tan especial, Mar escogió una mantilla blanca y un vestido de Galliano.
Su romance se había transformado en un escándalo, puesto que Mar no gozaba de una muy buena relación con la madre de su novio, la Duquesa de Alba. Aún de este modo, que la modelo asistiera a la boda de Eugenia y Fran era una constatación de que su noviazgo era algo más que un breve idilio. La verdad es que, con el paso del tiempo, el tiempo dio la razón a Carmina, ya que el matrimonio acabó separándose después de ofrecer la bienvenida a su única hija, Cayetana. Eugenia sí que coronó su look nupcial hace 20 años con entre las tiaras que pertenecen a la vivienda de Alba, la de la emperatriz Eugenia de Montijo, una parte inusual formada por enormes perlas, diamantes y platino. En este momento, la duquesa de Montoro decidió volver a lucirla en un reportaje fotográfico de la gaceta Harper’s Bazaar , un trabajo que Eugenia agradece al estilista Josie en Instagram. De ahí que, varios han aplaudido la decisión de Eugenia Martínez de Irujo de regresar a mostrar la que ella llevó el 23 de octubre de 1998, el día de su boda con Fran Rivera .
Eugenia Martínez De Irujo Vuelve A Lucir La Tiara De Su Boda Con Fran Rivera 20 Años Después
O Tómbola lograron a través de el humor o el crudo amarillismo que público que jamás había sido aficionado a lo que se conocían de forma despreciativa como “cotilleos” se transformase en consumidor de esas novedades. La anécdota, la “espuma de la vida”, había conseguido en el 98 categoría de primera novedad. Poco tiempo después, el torero reconoció que le había sido infiel a su mujer y aseveró que Eugenia era y proseguiría siendo siempre ‘el cariño de su vida’.
Se encontraba confeccionado en raso duquesa de color marfil con un galón bordado en hilo de seda con perlas ribeteando escote, hombros y costadilloso. Su relación con Fernández Tapias se rompió cuando ella le dejó por Alessandro Lequio, popular por su parte por ser el ex de Ana Obregón, asiduo a los platós y a los escándalos de diversa intensidad. El conde Lequio y Mar difieren en las datas de su relación, pero durante un tiempo ella engañó a su pareja oficial, el prestigioso empresario mayor, con el atrayente y ruin italiano. Era como un culebrón, un vodevil o una novela romántica en la vida real. Entonces, por si acaso hacía falta algún elemento mucho más de opereta, apareció el príncipe azul, duque de Arjona y conde de Salvatierra. Entre las convidadas que mucho más llamó la atención fue Mar Flores, que se estrenaba como novia de Cayetano Martínez de Irujo.
Eugenia Martínez De Irujo Comparte Las Fotografías Más Íntimas De Su Boda Con Fran Rivera (y Homenajea A Emanuel Ungaro)
La modelo y actriz Mar Flores salía con Cayetano Martínez de Irujo en la fecha de la boda y si bien su relación no era bien vista por algunos de los Alba, ella asistió a la boda, accediendo sola en la catedral. La duquesa de Alba lució un vestido verde botella de Toni Benítez con hojas sobreimpresas en terciopelo. Los zapatos y bolso eran del mismo tejido y la mantilla, de color vainilla. La foto de familia en el palacio de Las Dueñas no pudo realizarse al completo por el hecho de que el tráfico y el gentío impidieron a Jacobo y a Julián llegar a tiempo. El primer llanto de Eugenia fue consecuencia del susto que le causó verse rodeada de centenares de personas que le asediaban. Estaban más alerta a las oraciones que tenían que pronunciar y que les iba soplando el sacerdote en voz baja, que al momento que vivían.
El altar se encontraba presidido por una imagen de la Virgen de los Antídotos, frente a la que media hora después se dieron el “sí”. Para la ocasión, se adornó con una greca de 35 centímetros de verdes de olor y una selección de flores como limonium, espuelas de caballero y rosas en tonos blancos y rosados. La ornamentación, obra de Mati Romero de Solís, se completaba con candelabros de velas blancas. La duquesa de Montoro publica unas bonitas fotografías del día de su boda con el torero que hasta ahora pertenecían a su álbum privado.
En su nutrido currículo sentimental no faltaron nombres tan importantes como el de la Infanta Elena o Sonia Martínez. Eso sí, a Mar tampoco le fue totalmente mal en el amor y se le relacionó con Bertín Osborne o Carlos Lozano. El 23 de octubre de 1998 fue el día elegido por los novios para darse el ‘sí, quiero’. Eugenia Martínez de Irujo apareció en una soleada Sevilla con un vestido de satén firmado por Emanuel Ungaro que tenía un escote cuadrado y con ciertos datos de encaje. Entre todo cuanto ha recordado Fran, nos ha llamado singularmente la atención de qué forma ha hablado de su hija Cayetana Rivera, con la que sostiene una excepcional relación, pero la verdad es que siempre se mostró muy receloso a hablar de la joven. El día de hoy, en este espacio tan agradable, no ha dudado en comentar de qué forma es su vínculo con ella…
Las Miradas Estaban Puestas En Mar Flores, Como Nueva Novia De Cayetano
La infanta Elena llegaba a la catedral del brazo de su entonces marido, Jaime de Maricharlar. Ellos fueron los primeros en felicitar a los novios, Eugenia hizo una genuflexión frente doña Elena y después la besó. El torero Jesulín de Ubrique asistió acompañado de una prácticamente ignota en esos años, Belén Esteban. De esta forma lo vivió DIEZ MINUTOS. Para la ocasión, la gaceta editó una edición especial con 75 páginas de la que llamó \’la boda del año\’. Antes de unirse a los familiares de los dos, que les aguardaban en el interior de Las Dueñas, la pareja posó enamorada y se besó tiernamente frente a las miradas de los hispalenses.
Carmina Desafió El Protocolo Con Su Mantilla Azul
El peinado, de Manió de Rígoli, era un recogido bajo del que le salía una trenza postiza. El pueblo sevillano se echó a la calle para vitorear a una novia que no perdió la sonrisa. Eugenia y Cayetano se trasladaron a la catedral en una calesa tirada por 2 mulas acicaladas con caireles y conducida por 2 cocheros con traje de corto. En el caso de Mar, de su amor con Fernández Tapias no había logrado solo abrigos de piel valorados en varios millones de pesetas, sino también un papel en la película Resultado final, del prestigioso Juan Antonio Bardem. Se mencionó que tras múltiples años intentando encontrar financiación, el directivo la había conseguido del empresario en lugar de colocar a su novia como protagonista. Cuando se estrenó, las críticas destruyeron el filme y sobre todo la interpretación de Mar.
“Que me agradan los perros por el hecho de que son muy leales y en ocasiones me siento muy sola, si bien esté cercada de mucha gente. Que de pequeña era gordísima y ahora estoy todo el rato medio ofuscada con adelgazar. Desde los 20 años, por el hecho de que no se me daban realmente bien los estudios y los dejé en tercero de BUP”. A lo largo de toda esta etapa la joven duquesa tenía una tienda de tendencia en Sevilla, Ciencias Naturales, que había abierto con la ayuda de su madre pues no deseaba estudiar ninguna carrera universitaria. La tienda duró abierta siete años, y su cierre coincidió con el retorno de la relación con Fran, en el 97.
También el plantel de servicio de la residencia los aguardaba en los jardines para felicitarlos. Un link con aire de boda real que atrajo la atención del enorme público. La pareja llevaba saliendo desde 1997 y su link se transformó en todo un evento popular que atrajo a una infinidad de curiosos. Entre los convidados se encontraron grandes semblantes del panorama nacional como Rocío Jurado y José Ortega Cano, Carmen Martínez Bordiú o Raphael.