Donde Comer Bien Y Barato En Gijon

El restaurante El Mirador de la Playa está situado en primera línea costera y su oferta gastronómica es de calidad. Aparte de contar con un menú casero, el valor es bastante barato relacionado con la zona en la que está. El menú del día entre semana son 15 euros y los fines de semana 17 euros. Tar d’Abéu (María Bandujo, 1) es un local emplazado en el habitual barrio de Cimavilla donde disfrutar de productos asturianos de primera calidad a buenísimos costes y con un ambiente maravilloso. La carta corre al cargo de Gonzalo Pañeda, que trabaja de una forma excepcional la cocina asturiana.

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Sole y Pablo han logrado la fusión especial entre la repostería europea y argentina en este paraíso para golosos llamado Punto Caramelo . Tienen todo tipo de pasteles, tartas y dulces, aunque se hicieron un hueco en el corazón de los gijoneses gracias a su increíble pluralidad de alfajores de dulce de leche. La Gijonesa 8211 Imagen cedida por El Rincón de SeleLa Gijonesa es otro pequeño milagro para los amantes de las delicatessen. Esta marca cien% asturiana tiene muchos clásicos de la gastronomía de la zona preparados con mucho mimo y un diseño bello. Las salsas y las patatas brutales y además tienen otras propuestas muy interesantes como bocadillos de calamares, woks de arroz y de noodles o croquetas. Se encuentra dentro de los 15 bares y restaurantes en Cimavilla que nos recomienda nuestra compañera Ida Plaza en 1000sitiosquever.

Gijón, Una Localidad Para Comérsela Mediante 12+1 Vivencias Gastronómicas Top

Fuimos a la noche y el menú de Gijón Gourmet nos parecía demasiado por lo que Jose Luis Camacho, chef y alma del local, se ofreció a asistirnos. Nos chifla que nos sorprendan por lo que dijimos que sí sin entrar en dudas y terminó decidiendo él todo lo que íbamos a comer. Puedes ir en taxi, si indicas que quieres un servicio de Taxi-Llagar de la Ruta de la Sidra Xixón te hacen precio especial.

Reconocido con 2 soles Repsol, merece la pena reservar y evaluar una extraordinaria experiencia gastronómica. El típico restaurante que pasa desapercibido desde la calle o el local que, por discreto y por ubicase en una calle lateral, no entrarías. A no ser que lo buscaras específicamente por recomendación de un local. Un día de frío y lluvia -típicamente asturiano- anduve preguntando por un ubicación donde comer fabada. Casa Zarracina fue la contestación y, desde luego, las fabes con almejas de las mejores que he probado en todos mis viajes a Asturias.

Añadir España Impresionante Como Ingreso Directo

Puedes soliciar un menú del día realmente bien ajustado por diez,50€ o comer a la carta que fue lo que hicimos nosotros. La atiende su dueño y te prometo que te va a hacer sentirte como en casa. En nuestro caso llovía a jarros y nos dejaron ingresar con dos perros si ningún inconveniente, lo que siempre se agradece. La primera cosa que deseo decirte es que conocemos bastante bien Gijón y sus restaurantes ya que es una ciudad que hemos visitado múltiples veces.

La Galana está en la mismita plaza mayor de Gijón y en contra de lo que puedes meditar en un primer momento no es ni mucho menos un local a la caza del guiri. La atención es muy buena y puedes comer tanto comida un tanto más tradicional como otros un poco mucho más desenfadados. Nosotros probamos una tabla de quesos, las lágrimas de pollo con fideos salteados estilo thai y las croquetas de calamar en tinta que estaban exquisitas. Estos son los sitios de comidas y sidrerías que a mi mucho más me han gustado tras esas tres visitas.

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Soy Licenciado en Ciencias de la Información en la especialidad de Periodismo. He trabajado y colaborado en numerosos medios de comunicación en temas relacionados con Internet, nuevas tecnologías y turismo. Además, soy co-creador del libro Viajar con niños, el manual para elaborar tus vacaciones en familia de La editorial viajera.

La frase popular de «a absolutamente nadie le amarga un dulce» cobra mucho sentido en Gijón. Tiene ciertas pastelerías, confiterías, bombonerías o heladerías más impresionantes de España. Tanto es conque desde hace unos años la localidad puso en marcha la iniciativa ‘Gijón Goloso‘ en la que puedes evaluar cerca de 20 especialidades elaboradas por las maestras y profesores pasteleros de la región asturiana. Si traducimos su nombre del astur significa “estar bien, estar de celebración” y es que este local es ideal para tomar unas sidras acompañado de buena comida asturiana. Emplazado en pleno puerto deportivo de Xixón, Auga es el único local de la región asturiana que cuenta hoy en día con una estrella Michelín. Su ubicación es fabulosa, en tanto que mientras disfrutas de su increíble carta tienes la sensación de estar sobre el agua.

Verdaderamente es particular, todo hecho a mano, sin colorantes ni conservantes ¡pasteles y bizcochos reales! Vete a primera hora, por que al ser enserio preparaciones de obrador los dulces los encontrarás en el momento en que se desarrollan pero de este modo te aseguras que lo que allí comas será hecho del día. No caigas en el fallo, el 99% de los cachopos que te venden en Asturias son para compartir, jamás pidas uno para ti solo. Si bien el típico es el de carne de ternera con jamón y queso, tienes que probar el de cecina con queso de cabra y cebolla caramelizada o otras alternativas más distintas que la habitual. Otro de los puntos que nos sorprendió de Xixón son sus increíbles tiendas de productos gourmet y delicatessen. Una manera emocionante de llevarte a casa (o a un pícnic) lo destacado de la gastronomía de Asturias.

Está por la zona centro de Gijón y es de estos sitios que conjuga comida tradicional con alguna oferta mucho más renovadora sin grandes metas. Las porciones son espléndidas y el plantel muy atento, cuando menos en nuestro caso la camarera que nos atendió era atractiva. Recuerdo especialmente unas setas con salsa de la casa que probablemente son las más ricas que hemos comido en un buen tiempo, merece la pena ir solo por probarlas. Asimismo solicitamos rape a la plancha, en este caso no tenía mucha miga y las patatas nos las pusieron frías. Si volviésemos quizás nos sentaríamos en las mesas del bar y solo pediríamos sidra y las exquisitas setas.